COMENTARIO CRÍTICO SOBRE EL TEMA:

AL-ÁNDALUS

Inés Rodríguez Castillo, grupo B.

Laura Goded concretó en su exposición el fruto de un sesudo y minucioso trabajo de investigación. Nuestra compañera utiliza ambos elementos -trabajo previo/exposición-, para analizar el tema Al-Ándalus que ofrecen cinco libros de texto de Historia. Critica, en mi opinión de manera acertada, el tratamiento que recibe este contenido en las publicaciones que, por lo general, se quedan en lo anecdótico o caen en el reduccionismo. Laura argumenta escrupulosamente y llega a conclusiones atinadas, muy ricas en matices. Algunas de las más importantes son:

-Se debería explicar Al-Ándalus a continuación del tema del Islam, sin demora en la programación. El estudio sucesivo de estos temas ayuda a que el alumno hile mejor el discurso de la cultura islámica, aprendiendo en primer lugar rasgos generales que luego aplicará al particular y heterogéneo caso de la Península Ibérica.                

-La ciencia, la literatura, la filosofía, la música, la geografía; son legados capitales de la cultura de Al Ándalus. Constituyen un corpus intelectual de tal importancia para el conocimiento universal que resulta cuando menos grotesco su tratamiento mediante unas cuantas obviedades. Debiera de constituir un capítulo de especial incidencia en los alumnos, exponiendo su valor como cimiento de muchos avances culturales, científicos y tecnológicos de la actualidad.

-Es necesario hacer hincapié en el papel de la mujer en Al Ándalus, en las dificultades o prerrogativas respecto del hombre.

-Resultan estimulantes las actividades de etimología propuestas por Laura. Con ellas, los alumnos aprenden palabras quizás desconocidas para ellos, su origen y relación con otras materias, como la geografía (acequia, albufera, albaricoque,…)

Otras propuestas                                                                           (Inés Rodríguez)

-Los estudiantes deberían conocer con claridad las etapas evolutivas de Al-Ándalus. Por su complejidad, es necesario presentar los rasgos de los períodos más importantes para saber diferenciar el Al-Ándalus Omeya, del de los Reinos de Taifas.

-Resultaría de interés complementario la lectura en voz alta de poemas andalusíes, algunos muy evocadores y de fácil comprensión, como el compendio Poesía Andalusí, en edición de Manuel Francisco Reina. Además, podrían relacionarse con la epigrafía que recubría los palacios y mezquitas más nobles. También se podrían leer y/o analizar fragmentos de textos de geógrafos como Al Idrisi o Ibn Battuta, fundamentales para ampliar la visión del tema, a la par que divertidos libros de viajes.

-Se debe reivindicar el papel del arte andalusí, más allá de la mera ilustración histórica. Una actividad sugestiva constituiría la visita a vestigios de ciudades islámicas cercanas, por ejemplo la de Vascos, en Navalmoralejo (Toledo), explicando sus características más importantes.

-Una opción útil para desmontar artificios -en este caso desmitificar el romanticismo creado en torno a Al-Ándalus- podría consistir en el análisis de reconstrucciones sin fundamento científico, de ciertos monumentos islámicos, en el s. XIX.

-Por otro lado ¿Dónde queda el estudio de una de las principales ciudades andalusíes como es Medina Azahara?

En resumen y para finalizar, una crítica: es exigible mayor rigor y coherencia en los contenidos del tema Al Ándalus en los libros de texto. No se puede despachar una herencia histórica única, un patrimonio de primer orden, mediante algunas obviedades rayanas en el exotismo, cuando no en ramplonas imágenes del cine de cartón piedra. Nuestros alumnos merecen sobre todo respeto, y desde luego un mejor y más preciso tratamiento de la información histórica. Esta se puede enseñar, sin ofender, de manera sugestiva, aunque de nuevo nos topamos con el problema del tiempo…

En nosotros, los docentes, está darles a conocer con solvencia a sus/nuestros antepasados. En ellos, encontrar motivos para sentirse orgullosos, o no, de descender de la esplendorosa Al-Ándalus.